Los extranjerismos y latinismos crudos o no adaptados —aquellos que se utilizan con su grafía y pronunciación originarias, como ballet, paddle y quorum— deben escribirse en los textos españoles con algún tipo de marca gráfica que indique su carácter foráneo, preferentemente en letra cursiva. Sin embargo, los extranjerismos y latinismos adaptados, como balé, pádel y cuórum, se escriben sin ningún tipo de resalte y se someten a las reglas de acentuación gráfica del español. Por consiguiente, podemos elegir entre escribir "Mi hijo baila ballet" o "Mi hijo baila balé".
Asimismo, las locuciones o dichos en otras lenguas (sí, incluyendo el latín clásico) que se utilicen en textos españoles deben escribirse igualmente en cursiva —o, en su defecto, entre comillas— para señalar su carácter foráneo. Ejemplo de ello son grosso modo, happy end, femme fatale, in crescendo, sine die o status quo.
EJERCICIOS
¿En cursiva o en redonda?
● Aquella historia tuvo un happy end/happy end de película.
● Me encanta jugar al paddle/paddle.
● Nunca he bailado balé/balé.
● En esta escuela no se respeta el status quo/status quo.
● El campeonato de pádel/pádel ya ha comenzado.
SOLUCIONES
● Aquella historia tuvo un happy end de película.
● Me encanta jugar al paddle.
● Nunca he bailado balé.
● En esta escuela no se respeta el status quo.
● El campeonato de pádel ya ha comenzado.
Fácil, ¿no? Cuando se conserva la grafía original, venga esta del latín clásico o de otro país, debemos recurrir a la cursiva, pero, cuando adaptamos la misma al castellano, no.